_Sector de usuarios: aún hay vida en la oficina
¿Qué sabemos?
Mercados en pausa y deterioro de la confianza empresarial. Hemos realizado un seguimiento de la confianza en 16 mercados de oficinas mundiales desde principios de abril. Sin duda el Covid-19 ha provocado una ralentización extrema de las necesidades activas de los ocupantes y un notable aumento del número de operaciones pospuestas. El deterioro de la confianza empresarial es una pieza clave de esta ralentización y, según una encuesta reciente a directores financieros de todo el mundo, dos tercios han retrasado o pospuesto inversiones y restringido el gasto de capital. Tardaremos un tiempo en ver cómo evoluciona esta situación, pero en la última quincena hemos observado una mejoría en el nivel de actividad de los ocupantes de Hong Kong, el primero de los mercados analizados expuesto al Covid-19. Esta mejoría es motivo para un cauto optimismo.
La reocupación en el punto de mira con la retirada gradual de las medidas de confinamiento. Mientras los diferentes gobiernos establecen las vías de reapertura gradual de sus economías, las empresas han centrado su atención en el regreso a las oficinas. La situación dista mucho de ser una vuelta "normal" a la vida de oficina. La imposición de medidas de distanciamiento social –y de una separación de dos metros entre las personas– está forzando una reconfiguración de la disposición de las oficinas, con una reducción de entre un 50% y un 60% de su capacidad en la mayor parte de los casos.
¿Qué prevemos?
Continuidad del gran workplace global. A medida que aumente el número de empresas que vuelven a la oficina, avanzaremos con rapidez hacia la segunda fase del gran experimento mundial en materia de los lugares de trabajo. Las limitaciones de la capacidad dentro de las actuales carteras de oficinas obligarán a las empresas a adoptar sistemas de trabajo híbridos, con una clara distinción entre personal que trabaja desde casa o en la oficina. A los directivos no les resultará fácil alcanzar un equilibrio en este sentido, ni desde una perspectiva operativa ni directiva.
Evolución, no revolución. Se han hecho muchas afirmaciones sobre los efectos del Covid-19 en la ocupación de las oficinas. Desde Knight Frank creemos que se acelerará la evolución de muchas de las tendencias de mercado ya evidentes en el sector antes de la pandemia. Un motivo principal de esta evolución es la limitada capacidad de los usuarios para ejecutar cambios con rapidez tanto a nivel de activos individuales como a nivel de cartera.
¿Qué nos cuestionamos?
Un giro fundamental en la dinámica de la oferta vs la demanda precrisis. Cada vez se habla más de la repercusión que tendrá el Covid-19 en los fundamentos de mercado. Pese a tener que vigilar de cerca la actividad de subarrendamiento en los mercados internacionales (con un repunte en cuatro de los 16 mercados analizados en la última quincena), nuestra opinión es que se mantendrá la limitada oferta de oficinas de calidad en los mercados mundiales, entre otros motivos, debido a las restricciones prácticas y económicas a corto plazo respecto a la entrega de espacio de obra nueva. A nuestro juicio, la demanda será sólida tras la crisis. Pese a reconocer posibles dificultades en la coyuntura económica, la urgente reestructuración empresarial (en particular con respecto a la transformación digital) favorecerá la dinámica de disrupción = demanda señalada anteriormente.
"La oficina constituye el elemento central para la creación y el mantenimiento de una cultura corporativa. Resulta esencial para propiciar la innovación y la creatividad necesarias con el fin de seguir siendo competitivos."
La "muerte de la oficina". En los últimos dos meses, se ha recuperado con gran entusiasmo un discurso surgido hace 20 años que augura la muerte de la oficina. La imposición del teletrabajo y la actual irrupción de sistemas de trabajo híbridos que combinan el teletrabajo con el trabajo en la oficina han derivado en una enérgica defensa de las ventajas que podrían obtener las empresas si eliminasen su segundo mayor coste de explotación. No obstante, este es un discurso ingenuo. La oficina constituye el elemento central para la creación y el mantenimiento de una cultura corporativa. Resulta esencial para propiciar la innovación y la creatividad necesarias con el fin de seguir siendo competitivos. Es el lugar donde se produce la formación y el desarrollo del personal esencial (y normalmente táctico) y en el que los vínculos sociales se transforman en importantes colaboraciones profesionales. Las empresas son infinitamente más débiles si no pueden recurrir a un punto central y colectivo identificable. Esto no quiere decir que no deba replantearse el formato y la función de las oficinas, pero volvemos a repetir que los rumores que auguran su desaparición constituyen una enorme exageración.
Para más información, o para cualquier consulta sobre espacios de oficinas en Madrid para su empresa, no dude en ponerse en contacto con nuestro equipo de Agencia Oficinas.