_Sale a la venta el ático de Santa Isabel 21-23, la mejor vivienda del proyecto
Knight Frank ha vendido la totalidad del proyecto residencial en la calle Santa Isabel 21-23 en apenas 12 meses y saca a la venta el ático, el mejor activo en un proyecto de 24 viviendas y una renovación integral del palacio que ocupa los números 21 y 23 de la calle con su mismo nombre. En un edificio restaurado por Touza Arquitectos e interiores diseñados -por el decorador Raúl Martins, las viviendas disponen de entre una y tres habitaciones y el inmueble dispone de zona ajardinada, garaje subterráneo y gimnasio en un gran proyecto que recupera todo el esplendor del Palacio de Santa Isabel.
Todo ello en uno de los enclaves históricos y culturales más emblemáticos de Madrid, a unos pasos del Museo Reina Sofía y el Paseo del Prado. Una zona que en los últimos años ha cobrado relevancia en la ciudad por una oferta cultural, de ocio y gastronómica en constante renovación.
El proyecto en la calle Santa Isabel ha supuesto un importante reto arquitectónico. La restauración ha ido de la mano del equipo de Touza Arquitectos, quienes gracias a su dilatada experiencia han sabido fusionar pasado y presente adaptando el espacio original a las comodidades de nuestros días, respetando las características originales de este edificio catalogado y potenciando la elegancia que define su personalidad.
La rehabilitación de este edificio ha supuesto la demolición de algunas intervenciones no originales y la creación de zonas verdes interiores y un aparcamiento subterráneo. También se han recuperado los antiguos patios con sus fachadas y el “escalón” para subir a los carruajes de antaño.
Por otra parte, debemos destacar el trabajo del diseñador de interiores, Raúl Martins, que ha desplegado contemporaneidad y buen gusto en su trabajo, sacando el máximo rendimiento a este espacio: mármol, colores pastel y el uso de plantas y el juego con la abundante luz natural transmiten serenidad y optimismo. También se han incorporado detalles cuidados, como piezas escultóricas, porcelanas hechas por encargo o cuadros de autor. Según afirma el propio decorador, “con todo ello descubrimos espacios con aire trendy, fresco, colorista y actual, sin renunciar a la sobriedad ni al marcado carácter del edificio".
De igual manera, el equipo de arquitectos ha trabajado con esmero para crear “espacios abiertos”, zonas verdes dentro del conjunto residencial que constituyen un oasis de paz en el que es posible respirar el perfume de los cipreses y los madroños, en pleno centro de la ciudad. Según comentan desde Touza Arquitectos, "afrontar la rehabilitación del Palacio de Santa Isabel ha supuesto un ilusionante reto a varios niveles. La azarosa vida del edificio que se remonta a más de 200 años atrás refleja la complejidad que tienen las obras de rehabilitación y más cuando se trata de edificios catalogados integralmente como es el caso”.
Una zona histórica, un presente revitalizado
Hay calles que dan prestigio a una ciudad y en Madrid, la calle Santa Isabel es una de ellas. Dicen que Teresa Mancha de Bayo, amante de Espronceda, vivía en esa calle. También en Santa Isabel se instalaron el Real Colegio de Cirugía de San Carlos, el Instituto Oftálmico o el Cuartel de Santa Isabel. En 1850 formó parte de las propiedades del Barón de Lajoyosa, y posteriormente, pasó a ser el Colegio San Estanislao de Koska.
A la rica historia de esta calle debemos añadir la gran oferta de arte y cultura que ofrece la zona que la rodea. Estamos en el “Triángulo del Arte” de Madrid, que une el Museo del Prado con el Museo Thyssen-Bornemisza y el Museo Reina Sofia, piezas imprescindibles de los alrededores de la calle Santa Isabel. También se puede disfrutar de la programación de la Filmoteca Nacional, instalada en el viejo cine Doré inaugurado en 1912. La calle es sede del Colegio de Médicos de Madrid, del Real Conservatorio de Madrid y del Museo Reina Sofía.
La gastronomía es parte del ADN madrileño y el Mercado de Antón Martín hace honor a la buena comida y mejores vinos de la capital. Este mercado tradicional cuenta con el mejor ambiente de la zona y es obligado visitarlo cada sábado por la mañana para conocer su irresistible ruta de tapas. Las cazuelas del Plenti, y las diferentes y deliciosas tapas del Triciclo forman ya parte del itinerario de los residentes. Otro plan ineludible es desayunar unos tradicionales churros en uno de los mejores locales de la ciudad: El Cholocat.
La recuperación del Palacio de Santa Isabel es un buen ejemplo de cómo la huella original de una época inolvidable de nuestra historia se puede fundir con las necesidades que plantea una vivienda moderna integrada en pleno centro de la ciudad. Los números 21 y 23 de la tradicional calle Santa Isabel son un referente, un equilibrio perfecto entre historia y diseño vanguardista que ha dado como resultado unas viviendas admirables en pleno corazón de Madrid.
Para más información, no dude en ponerse en contacto con Alejandro Rodríguez-Azero,+34 600 919 045